El proyecto Acceso al teatro – Escuela Popular consiste al ofrecer formación completa en artes escénicas a personas que vivan situación de pobreza, apoyando a entidades, instituciones y servicios de la ciudad.
Escuela de interpretación para niños y jóvenes, que se concibe como recurso para enseñar teatro trata de incidir al formarlos como actores sociales y sujetos históricos. El teatro es un motor para actuar en favor del cambio social, sobre todo con aquellos colectivos que sufren prácticas que los excluyen socialmente. A través de nuestros cursos regulares se consigue la formación integral que permite actuar de manera sólida y fundamentada dentro de diferentes ámbitos sociales con el teatro como impulsor de iniciativas. Se da la formación más completa del país de Teatro del Oprimido.
Actualmente, ha cogido fuerza el teatro como motor de cambio y hay muchas iniciativas que nacen de esta idea. El teatro que tiene que transmitir mensajes diferentes, algo de alternativo al que se hace en el ámbito institucional, que se aleja de la realidad porque cae en dos trampas. La primera, es la de describir a los opresores como gente tanto «mala» y hacen caricatura, y las representaciones, herederas inconscientes del realismo socialista, son las dominantes hoy en los movimientos sociales y, según la evaluación del equipo pedagógico, contribuyen poco en un análisis concreto de la situación concreta, así como a las posibles maneras de superarla. Por lo tanto, la Escuela se posicionó como hecho con movimientos, para movimientos, pero también, hasta cierto punto, contra los movimientos. Puesto que y aquí viene la segunda trampa en el cual cae el teatro popular o alternativo, que es la idealización de la lucha en sí. Se piensa que la acción transformadora no es una construcción, es la solución a todos los problemas y, muchas veces, se piensa que a todos los problemas individuales. Es decir, que habrá un momento que ganará cierta idea y se acabarán los problemas. Desde la escuela se quiere transmitir la idea de construcción y no de finalidad.
La escuela popular acontece un espacio participativo para crear no solo actores, sino sujetos históricos mediante el cuestionamiento activo de que los rodea. El proyecto es un plan artístico para ofrecer una formación que sirve de estrategia metodológica para garantizar el apoderamiento de los asistentes. El proyecto propone dar acceso al teatro a personas del barrio y de Barcelona, especialmente a los jóvenes, con pocos recursos.
Aunque el trabajo se basa en Augusto Boal (y de su hijo Julián Boal), también se retoma Brecht . El estudio de la realidad es el punto central aunque esta se encuentra llena de contradicciones, además, estas son dinámicas. Así se trabaja con el alumnado de la Escuela, ejercicios basados en el uso de la dialéctica.
La experiencia sobre el funcionamiento, la proximidad y el arraigo de la entidad al barrio y la ciudad, las redes en las cuales se participa, permiten que haya garantizada una asistencia en sus cursos. Una vez aquí, el alumnado sabe que se le pedirá que piense su papel como ciudadanos erradicando los posibles chascos que podan y hacer un análisis de la precariedad económica son llamados «colectivo con riesgo de exclusión».
Con el apoyo de un 43,5 % por el ICUB